Cuando se llevan brackets, la limpieza bucodental debe ser, si cabe, aún más minuciosa y profunda.
Preparación de la cavidad bucal
Para proceder a la limpieza diaria de los dientes y brackets debe prepararse la boca previamente. En este sentido, han de retirarse los componentes no fijos de la ortodoncia (elásticos…).
Los aparatos removibles pueden cepillarse y enjuagarse con agua y jabón. No deben hervirse ni utilizarse productos tóxicos para su limpieza.
Cepillo, crema, seda dental, cepillo interdental y colutorio
Es aconsejable emplear un cepillo especifico para ortodoncia para facilitar la labor de limpieza, además de pasta de dientes fluorada. En el mercado pueden adquirirse cepillos especiales para brackets de distintos tamaños y formas, para adaptarse mejor a las características de cada usuario. Los interproximales o interdentales son especialmente recomendables. En cuanto a los colutorios, han de utilizarse al menos dos veces al día, después de los cepillados.
Los profesionales recomiendan usar la seda dental, al menos una vez al día, para una mejor higiene. La seda debe moverse de arriba abajo,a través de la corona y las encías. Enhebradores y superfloss facilitan considerablemente esta operación de higiene bucodental.
Cepillado
Con la ortodoncia, el cepillado precisa más dedicación y cuidado. No en vano, han de limpiarse dentadura completa, brackets, arcos,….
A la hora de limpiar los brackets, es recomendable mantener recto el cepillo y realizar pequeños movimientos de rotación unas diez veces. Después, debe inclinarse levemente desde la superficie de masticación, introduciendo con suavidad las cerdas en el hueco existente entre la ortodoncia y los dientes. El último paso consiste en cepillar las encías, acción de gran importancia en la batalla contra la placa.
Es recomendable tomarse el tiempo necesario para limpiar cada pieza dental, al menos diez segundos por cada una de ellas, además de tener especial precaución en los puntos en los que conectan brackets y dientes.
Durante el tratamiento, es crucial lavarse los dientes y brackets después de cada comida. No olvidemos que los restos de alimentos quedan depositados con facilidad entre las piezas de la ortodoncia y las dentales, favoreciendo la aparición de placa bacteriana y contribuyendo decisivamente a la formación de caries.
En las farmacias pueden adquirirse pastillas y soluciones reveladoras de placa, que colorean las zonas en las que se mantiene la misma. Es una magnífica manera de saber si nuestros dientes han quedado totalmente higienizados tras la operación de limpieza y cepillado. Tengamos en cuenta que la placa es difícil de detectar a simple vista.
Limpieza profesional
Al margen de la limpieza bucal realizada en casa, debe acudirse al dentista según el plan de mantenimiento establecido, para someterse a una higienización mucho más profunda y minuciosa. Sólo los dentistas ortodoncistas están capacitados para efectuar este tipo de revisiones, imprescindibles para la correcta aplicación del tratamiento.
La limpieza bucodental durante un tratamiento con brackets puede resultar algo engorrosa y complicada. Sin embargo, resulta fundamental para prevenir complicaciones o enfermedades como la gingivitis y la caries. Conviene ser escrupulosos con la higiene bucal en estos casos, pues sólo siendo estrictos en tales circunstancias se logran magníficos resultados, dientes más sanos y una sonrisa radiante .